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Dorothea Wassermeyer

(1942 - 2008)

Dorothea WassermeyerCon el fallecimiento de Dorothea Wassermeyer, la fisioterapia alemana perdió una de las compañeras más distinguidas.

Dorothea Wassermeyer, nacida el 14/09/1942 en Bonn como quinta descendirnte de siete en total de una familia jurista renana, decidió después de sus años escolares realizar la formación de fisioterapia, la cual cursó en las Clínicas Universitarias de Colonia. Tras la obtención del título de fisioterapeuta en 1966, trabajabó en la Clínica Universitaria Neurológica de Bonn y después en la Clínica Neuropsiquiátrica de Berlín.

1969 siguió su actividad fisioterapéutica, en el consultorio de espasticidad de la Clínica Universitaria Ortopédica de Colonia; allí fué una de las primeras compañeras del neuropediatra checo, Profesor Dr. Václav Vojta, que había emigrado de Praga a Colonia en agosto de 1968. A partir de este momento, el método de tratamiento neurofisiológico según Vojta – al principio con lactantes y niños con alteraciones motoras, después también con pacientes adultos - marcaría toda su vida laboral. La colaboración diaria con el Professor Dr. Vojta (1917 - 2000) rápidamente hizo que llegara a ser una terapeuta-Vojta excelente y sobre todo, eficaz. En 1971 ya fué una de las primeras instructoras-Vojta en Alemania.

En todos los lugares de su actividad fisioterapéutica a lo largo de unos 40 años – primero en Colonia, a partir de 1975 como coordinadora fisioterapeuta en el Kinderzentrum de la región de la Alta Bavaria en Munich, del 2000 al 2006 en el centro sociopediátrico de las Clínicas Municipales Frankfurt-Hoechst y hasta su fallecimiento como fisioterapeuta autónoma en Munich – Dorothea Wassermeyer pudo ayudar a innumerables lactantes, niños y adultos con el método de tratamiento neurofisiológico según Vojta. Durante dicho periodo de tiempo colaboró fundamentalmente, en la difusión del diagnóstico y de la terapia según Vojta en Alemania y en el extranjero, participando de manera decisiva en la estructuración de la formación especializada y continua para médicos y fisioterapeutas en el método-Vojta.

Trabajó como instructora en Alemania, Austria, Noruega, España, Chequia, Polonia, India, Australia, Corea, Japón y Méjico, como miembro de la junta directiva de la "Internationalen Vojta Gesellschaft e.V." (IVG) desde su fundación en 1984, como conferenciante en los numerosos grupos de trabajo de los terapeutas-Vojta, se dedicó a "la causa Vojta" en la mayoría de los casos también durante sus vacaciones y fines de semanas. Apenas existía un curso-Vojta para fisioterapeutas sin que ella haya formado parte de alguna manera.

Tenía el don de explicar de manera comprensible dicha terapia tan exigente, demonstrarla de forma clara en pacientes pequeños y grandes, aguzar la mirada de los que se formaban como terapeutas-Vojta con el fin de reconocer el problema decisivo correspondiente de cada paciente e instruir a sus compañeros en aplicar de forma creativa las diferentes técnicas dentro de la terapia-Vojta.

„Dotta" – como la llamaban muchos compañeros – era fisioterapeuta por vocación. Impuso grandes exigencias hacia sí mísma, pero también a pacientes y daba ejemplo por tanto a todos del ideal de una fisioterapeuta, cuya mayor afán era conseguir el bienestar del paciente. Si se trataba de encontrar la mejor ayuda fisioterapéutica para un paciente, la Sra. Wassermeyer no permitía soluciones a medias. Ella defendía con perseverancia lo que consideraba correcto debido a su gran experiencia y sus conocimientos médicos que se ampliaban permanentemente. Aunque convencida profundamente de las grandes posibilidades de la terapia-Vojta , Dorothea Wassermeyer se mantenía accesible para otros enfoques de tratamiento fisioterapéuticos. Ella los capturaba, los probaba y dado el caso los combinaba con la terapia-Vojta.
Ella sufría cuando se encontraba con el desconocimiento de pediátras, ortopedas o fisioterapeutas sobre las posibilidades del tratamiento fisioterapéutico precoz según Vojta. En todas estas cuestiones "Dotta" no era amiga de soluciones intermedias, incluso en el trato con compañeros y alumnos. Muchos la admiraban por eso, algunos en ocasiones la consideraban una compañera de difícil diálogo, sin embargo, todos la apreciaban y no en último termino por dicha característica.

Era admirable, Dorothea Wassermeyer en 1972, aún encontró fuerzas para asumir la tutela de Michaela, un bebé en la edad de lactancia con discapacidad espástica, gravemente afectada, a la que criaba, ayudándola para adquirir un alto grado de independencia.
De esta manera, fue ejemplo para muchos padres de hijos con discapacidad. Marcada por su propia vivencia, pudo apoyar a las familias con hijos descapaciados, especialmente en tomar una posición activa frente a esos destinos difíciles.
Su esfuerzo incansable y desinteresado tanto laboral como privado, por las personas con discapacidad fue reconocido publicamente en 1996 cuando le fué entregada la Cruz al Mérito de Cinta.

Estando con plenas fuerzas creadoras, el día antes de comenzar otro curso de terapia-Vojta para fisioterapeutas, Dorothea Wassermeyer falleció de forma repentina e inesperada el 10 de febrero de 2008 en Munich.

Llevamos luto por una fisioterapeuta destacada, que como compañera cercana durante años ha formado parte considerable en la obra del Prof. Dr. Vojta.
La recordaremos como una persona fuerte y especial.
Su ejemplo seguirá surtiendo efecto.

Wolfram Müller, Vorstand der IVG e.V.      Frauke Mecher, Vorsitzende der AG Vojta im ZVK